Hasta mediados del s. XIX la ciudad de Elche ocupaba el margen derecho del río Vinalopó y el
arrabal de Santa Teresa, levantado en el s. XVIII al otro lado del río. Su estructura urbana
mantenía la trama de época árabe, desarrollándose en la 2ª mitad del s. XIX el correspondiente
ensanche de la ciudad en el margen izquierdo del rio.
La reflexión sobre la integración de la ciudad lineal durante el s. XX en la zona del ensanche
permite tener una visión de desarrollo de estructuración del espacio ilicitano. El objetivo de este
artículo es doble: mostrar brevemente las adaptaciones urbanísticas generales de los barrios
del Cuartel y del Pont Nou de la ciudad de Elche y situar al lector en el inicio de la Arquitectura
Sacra de la ciudad, como política urbana y proceso de territorialización de Elche.
Se concluye que: la estructura lineal de cuadricula ilicitana fue un destacable caso del
urbanismo español del s. XX; el proceso de territorialización del ensanche siguiendo el modelo
del ingeniero Ildefonso Cerdà fue un acierto para la mejora de la ciudad sin embargo, tuvo el
inconveniente de provocar una alta densificación y la destrucción de los palmerales de la
ciudad ubicados en dicha zona; en el Plan General del 63 no se aplicó una política adecuada
de vivienda ante la creciente demanda y revitalización del ensanche, lo que provocó que
posteriormente resultase muy difícil la corrección de los equipamientos de dichos barrios en los
subsiguientes planes de ordenación urbana.