Esta investigación se plantea desde una pregunta fundamental: ¿Qué le otorga valor a los
diferentes entornos de una región metropolitana? ¿Que puede tener un carácter deseable
cuando se mide su eficiencia? Son muchas las variables que ofrecen esta posibilidad de añadir
valor. Entre ellas y como propuesta metodológica del artículo se propone la inclusión de la
diversidad y su análisis cuantitativo. Dado el carácter positivo y regulador de la diversidad
dentro de los sistemas urbanos, se ha desarrollado un modelo analítico incluyendo variables
que la cuantifican desde el ámbito económico y territorial y que junto a otras explican la
distribución del valor residencial. Entre los parámetros que se introducen en el análisis se
encuentran el uso del suelo, distribución del empleo, nivel de ingresos de la población,
accesibilidad, entre otras. La metodología adoptada se centra en realizar una medida
sistemática de la diversidad en una múltiple dimensión entendida como una relación
cuantificable del equilibrio y la abundancia para variables construidas previamente. A partir de
lo anterior se evalúa su efecto sobre un mercado de valor concreto: la Región Metropolitana de
Barcelona (RMB) a escala municipal. Dicho análisis permite arrojar conclusiones sobre la
importancia de su inclusión en la planificación de sistemas metropolitanos.
En el caso de la Región Metropolitana de Barcelona (RMB) y sus 164 municipios el estudio
muestra que la diversidad del empleo localizado, de la actividad económica y de usos de suelo
son factores positivos que tienen una influencia directa en la distribución del valor residencial.